El ácido bórico es una sustancia química que, en primera instancia, puede sonar peligrosa. Pero lo cierto es que se trata de un derivado formado por boro y agua, con propiedades antibióticas enfocadas a infecciones fúngicas o bacterianas.
Puede encontrarse en nuestra naturaleza (áreas volcánicas, minerales, agua del mar, plantas o frutas, entre otros) y que es de gran utilidad en nuestra sociedad.
Por un lado, el ácido bórico puede utilizarse como insecticida preventivo de plagas, especialmente contra cucarachas, hormigas o termitas.
Como remedio casero, puedes emplear este producto de la siguiente manera:
- Mezcla el ácido bórico en un recipiente con una cucharada de azúcar y otra de leche, hasta que se forme una pasta.
- Usar otros recipientes mucho más pequeños, como tapones de botellas, para colocar el producto.
- Reparte los tapones de botella por la zona donde se encuentre la plaga.
Estas trampas caseras atraerán a los insectos, que lo introducirán en sus nidos, haciendo que las plagas se eliminen desde la raíz. Es esencial que este producto se mantenga fuera del alcance tanto de niños y niñas como de los animales, ya que se trata de una sustancia tóxica.
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También podemos encontrar utilidad en el terreno agrícola, complementando su uso como insecticida.; en este caso, se utiliza como tratamiento y prevención de deficiencias de boro en aquello que se encuentra plantado.
Por otro lado, otro uso esencial del ácido bórico es como antiséptico, con propiedades antifúngicas y antibacterianas. Se emplea en productos desodorantes, para pies, previniendo la aparición de hongos (prevención de pie de atleta) introduciendo esta sustancia en polvo dentro de los calcetines o de las medias.
Un método casero para emplear el ácido bórico para el cuidado de los pies es el siguiente:
- Lavar los pies con jabón de pH neutro y agua tibia, utilizando guantes de goma.
- Secar los pies con una toalla limpia, pudiendo retirarte los guantes de goma.
- Agrega 1 cucharada y media de ácido bórico y 3 L de agua mineral tibia en un barreño o recipiente donde sumergir los dos pies juntos durante 15 minutos.
- Volver a lavar los pies con el jabón de pH neutro, el agua tibia y los guantes.
- Secar los pies con la toalla limpia y aplicarles la crema humectante para que queden hidratados.
Nosotros te ofrecemos nuestro Ácido Bórico 900 g (Ref: 043635), para que puedas llevar a cabo este método con éxito.
Otros usos más generales en los que podemos emplear el ácido bórico son: la cosmética protección de la madera contra el fuego, la fabricación del vidrio, cemento, porcelana, madera, cuero, alfombras e incluso jabones.
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